Lady Cao no fue solo una de las muchas momias que los arqueólogos han desenterrado en varias partes del mundo. Los descubrimientos de sus restos reescribieron la historia antigua y nos dieron una mejor comprensión de la cultura Moche.
Los Moche florecieron y gobernaron la costa norte del Perú antes de los Incas, entre los siglos I y VIII, al mismo tiempo que los Mayas prosperaron en México y América Central. Dominaron el desierto a través de un complejo sistema de irrigación, construyeron pirámides de adobe y, como muchas culturas antiguas, usaron la religión para unificar la sociedad.
En 2006, los arqueólogos descubrieron una momia moche femenina en el sitio arqueológico El Brujo, que se encuentra a unos 45 km al norte de Trujillo, en la región de La Libertad en Perú. Se hizo conocida como Lady Cao. Fue uno de los descubrimientos arqueológicos más significativos relacionados con los Moche. El descubrimiento de su espléndido entierro hizo añicos las nociones de los científicos sobre los moche, que hasta hace poco tiempo se percibían como una sociedad gobernada por guerreros varones.
Los exámenes de la antigua momia revelaron que Lady Cao tenía veintitantos años cuando murió alrededor del año 450 EC. Lo más probable es que la causa de su muerte hayan sido complicaciones debidas al embarazo o al parto. Se cree que esta tumba real, la octava descubierta en 25 años, perteneció a una sacerdotisa Moche enterrada hace 1.200 años. La gran cantidad de artefactos y la complejidad del entierro revelan el poder y la influencia que esta mujer ejerció en vida. Cortesía de Luis Castillo
Su lugar de entierro contenía valiosos artefactos y armas. Pronto se hizo evidente que Lady Cao era una mujer de gran importancia. Lady Cao fue enterrada con valiosos artículos de metal y cetros de madera envueltos en cobre que simbolizaban el poder que ejercía cuando estaba viva.
La momia de la Dama de Cao, que fue encontrada en el sitio arqueológico Huaca El Brujo, una gran pirámide de la antigua cultura prehispánica Moche, se ve en el Ministerio de Cultura en Lima, Perú, el 4 de julio de 2017.
GUADALUPE PARDO/REUTERS
Tenía una diadema de oro en la cabeza y vestía una gran corona en forma de V con la imagen de un puma en el centro y un collar con grandes cuentas, cada una con el mismo rostro felino. Tenía varios tatuajes simbólicos. En sus brazos y pies, los científicos descubrieron tatuajes de serpientes y animales. Otros tatuajes en su cuerpo incluían arañas, el árbol de la vida, figuras en forma de estrella, todos los cuales eran considerados elementos sagrados y que también aparecen en los frisos de los templos más grandes del complejo arqueológico El Brujo. Utilizando tecnología 3D sofisticada, los científicos reconstruyeron más tarde su rostro y, al hacerlo, se volvió más viva.
Hoy en día, la mayoría de los científicos piensan que Lady Cao podría haber sido una sacerdotisa o incluso un gobernante Moche que ha gobernado en el Valle de Chicama.
Hasta hace poco tiempo se creía que los Moche habían sido una sociedad gobernada por hombres guerreros, pero esta suposición resultó ser completamente errónea. El descubrimiento de Lady Cao demostró que las mujeres ocupaban un alto rango en la cultura Moche. La civilización Moche no tenía lenguaje escrito y los restos silenciosos de Lady Cao nos hablaron, revelando cómo era realmente su sociedad.
A veces basta con un solo descubrimiento para reescribir nuestros libros de historia.
